¿Quieres reducir gastos en tu empresa?
Si quieres reducir gastos en tu empresa, debes tener clara la naturaleza de los mismos. En esta entrada vimos porqué es conveniente, si no necesario, buscar una reducción de los gastos en la empresa. Ahora entraremos en cómo tratarlos para conseguir minimizarlos.
Hay unos gastos que varían con el volumen de producción, y estos se llaman gastos variables. Hay otros, que dentro de unos límites razonables, no cambian en relación a la producción. Los de este tipo, los llamaremos gastos fijos.
Gastos variables
Ten en cuenta que si estos gastos dependen de la producción, de entrada, no puedes eliminarlos sin más. Aquí podemos incluir entre otros:
- Compras de materias primas
- Suministros
- Envases
- Mano de obra directa (sobre todo en empresas de servicios)
- Distribución y venta
Para reducir estos gastos, hay que buscar la eficiencia en los procesos. Cambiar lo que sea necesario para poder hacer más con menos recursos.
Otra opción para reducirlos, puede ser encontrar mejores precios de los proveedores, bien porque buscamos otros, o porque conseguimos descuentos por volumen de compras o similares.
Gastos fijos
Para controlar este tipo de gastos, lo mejor es hacer un presupuesto de gasto.
Para identificarlos, lo mejor que puedes hacer es ver qué gastos fijos has tenido en los años anteriores. Una vez localizados, debes evaluar uno a uno si son necesarios. Construye un presupuesto en base cero. No intentes justificar un gasto solo porque tuvo lugar el año anterior.
Debes cuantificar lo que es necesario para el funcionamiento de la empresa y prescindir del resto. Seguramente tendrás partidas de gasto por inercia. Esto es, que se necesitaron en un momento concreto, y no se ha vuelto a evaluar si siguen siendo necesarios. Probablemente, ya no lo sean y los mantienes porque no has hecho un presupuesto de gastos.
Ten presente que cualquier momento es bueno para reducir tus gastos, no hace falta que sea a principio ni a finales de año. Revisa ahora tus gastos.
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